jueves, 15 de septiembre de 2016

PREMIO INTERNACIONAL CARIBE-ISLA MUJERES DE POESÍA 2016 OBRA GANADORA.

PREMIO INTERNACIONAL CARIBE-ISLA MUJERES DE POESÍA 2016



BITÁCORA

Carlos Zamora Rodríguez




Carlos Zamora Rodríguez (Matanzas, Cuba, 1962). Licenciado en Filología. Poeta y narrador. Miembro de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). Entre sus títulos se destacan el poemario Estación de sombras (Sanlope, 2001), que fuera mención en el Concurso Internacional de Poesía Nicolás Guillén (México, 1999); la novela En la mañana viva o Tan cerca hemos dormido (Ediciones UNIÓN, 2012), Premio de Narrativa Guillermo Vidal (2011); la noveleta para niños A Puerto Blanco no llegan las lluvias (Ediciones Matanzas, 2012), Premio Fundación de la Ciudad de Matanzas; el poemario Cada día la eternidad (Ediciones UNIÓN, 2011); la antología El amor como un himno, Poemas cubanos a José Martí (Centro de Estudios Martianos, 2008; y el libro de cuento La noche de Judas (Ediciones Matanzas, 2012). Ha sido finalista del Concurso Internacional ARTÍFICE, de poesía (Loja, Granada, España) en el año de 2005 y obtuvo mención especial en la II y IV ediciones de ese propio certamen (2002 y 2006), entre otros reconocimientos. Sus textos han sido incluidos en numerosas antologías cubanas y extranjeras.















                                                                                                         Para Judith, mi compañera de viaje


(Terminal 3/HAV 23: 25/ Iberia/ MAD 13:10/ BARAJAS)


Dejan sus huevos en esa colina accidentada, donde la vida comienza a repartirse. Un mínimo respiro y alzan otra vez las alas (como si reposar fuera un peligro, como si extenderse sobre el suelo les sumiera en algún tipo de vergüenza).

Ellos vuelven y nosotros rezamos frente a tierras movedizas, desconocidas.

Rueda el color, prolongan el viaje los latidos.

Como en una siega caótica, los que arriban ofician sin misericordia, arrancan de cuajo todo cuanto emerge, reclaman sus mitades.

Uno siempre apuesta a que la suerte llegará en el próximo ciclo. Pero es el azar quien juega y puede ser descortés, incluso peligroso, tocar las vidas de otros, rozar esos destinos que ahora corren deformes, con lazos o etiquetas.

Nunca se sabe cómo marca la estrella. Acaso abruman las maletas vacías o sonríe la cinta que han puesto para no confundir (no confundirte).

Estamos dentro. Huele a recién comprado.


(Se anuncia a los madrileños que el sol pondrá sobre las 21:48 y la luna será visible a las 00: 46)

                                                                                                                             Para Odalis, que sabe


En la calle te besan las novias del verano: esas brisas calientes. Yo atisbo la noche, que convoca el desplante. Saludan los boquerones descabezados. Con un leve sonido, al morir en mi boca, me advierten de la trampa. Enfundo otro anzuelo para la cerveza (cada vez más tostada) que me arrastra a una orilla de ahumados cristales.

Todo es blanco allá afuera: ha enrumbado hacia el sur la chica de los altos.

Renuevo los billetes en la espera, que parece tan larga como el vaso de la felicidad.

¿Nos comimos la luna? ¿Qué nos falta? Es Madrid, me repiten los que alzan el bar hasta el final del trago.

Ya no sé dónde puse las llaves ni los versos, pero es muy tarde cuando roza mi espalda y me dicta una calle de regreso.

¿Estoy solo si vuelvo mirarla? ¿Me traiciona con otro más tenaz que mi sueño?



(Mirasierra / Tren de Cercanías Renfe – Pitis / EL ESCORIAL)


                                                                                                                                              Para Janet


Me escoltan los difuntos. En la esfera armilar la culpa de los reyes dibuja las constelaciones. Ellos votaron: la Tierra al centro, justo como el corazón. El silencio, tan resistente como la roca, me corteja. 

(De qué material tan fundido el misterio que casi puedo tocarlo en los lomos de los manuscritos. Por qué esconder la evidencia si esa es la razón de estas paredes. Qué palabra me niegan las puertas alzadas, los postigos presos. A dónde voy, escaleras abajo. Por qué desempolvo esos frescos y coloreo la Historia con paleta nueva si el pintor ya ha lavado sus manos. Quién me designó juez de estos muros, quién me trajo hasta aquí confiado en mi indulgencia).

No está permitido robar esta memoria, pero Ptolomeo y yo miramos las montañas con el ojo del miedo y compartimos autógrafos. Qué pensarán mañana de nosotros, nos decimos, armados de legajos y cervezas.

Me estafan: en la estampilla, la piedra no me ensucia los dedos; el monasterio parece reposar, pero está alerta. Dios, en alguna parte, me consiente.


(Mirasierra / Metro Línea 9 – Príncipe de Vergara/ Línea 2 – Sol/ MERCADO DE SAN MIGUEL)


El queso, curado; yo, despierto. (El apetito del ojo roza a la muchacha su boca de cereza.)

Derramo el entusiasmo sobre el japonés que bebe un té de humo y se disculpa por la cámara llena de ciudades.

Extraviado en un cubo de Rubik: todos los lados anuncian el placer.

Una máquina pone la nube en mi camisa. Confundo los puntos cardinales: ¿en qué esquina apuestan las lasañas?

El universo: un puente de salivación hasta el futuro. Pero las maderas rezuman otra historia. Busco equilibrio sobre un millón de huellas.

Puedo ser arquitecto o soldado de filas, si dejan colocar mi país sobre ese fuego donde viven atunes.

Me zarandean jamones ahorcados y cervezas mulatas. Soy un perdedor: ya me quiero morir bajo este alud de especias.



(Mirasierra / Metro Línea 9 / PLAZA DE CASTILLA) 


                                                                                                                                    Para Balo y Yoel


Una calle, una estrella esculpida: Martí que alerta del semáforo. Yo, emigrado de súbito: traidor por la bufanda, que susurra el verano y no se atreve. Mi ojo de cristal para el asfalto que llamaron Habana sin saber. Esquivo la pasión como un golpe incómodo de viento. Han colgado a Miró y ondea sobre un edificio de papeles. Me falta el aire y no hay sábana que hinche a Madrid más allá de los lumínicos. He perdido el rumbo y me hace bien naufragar ahora que la patria descansa en el teléfono (pausa para recomponer; nada escrito: nada comprometedor). En el Bernabeu los goles enemigos; asomo la rabia a un café neutral: de espaldas al terreno, para no ver la gloria que puede venir de blanco esta única vez. Brindamos por la muerte de la tarde y un tren que nos sumerja en el sopor. A las afueras –clamo- como un regreso de mentira.



(Barrio del Pilar/ Metro -Línea 9- Núñez de Balboa / Línea 5 - Chueca – Calle del Barquillo, 29 /BOGUI JAZZ)


                                                                                                      Para Anita, que nos mostró el camino


Esas brujas cantan en la nube del vino, traducen la nostalgia con ardides curados. De piedras blandas han compuesto la música y comprimen la luz hasta que es sólo un guiño sobre el escenario. Yo me pierdo en la noche, descorcho el albedrío. En mi nuca se juntan el incienso y la nota.

Cedo ante el deslave: el murmullo de una canción muy vieja que florece en su boca. Cómo el humo del saxo nos envuelve sin vernos, cómo sabe que vagamos por la misma inocencia (yo marcado, ella virgen) los dos arrebujados a la sombra del jazz, en el coro de tristes que escapan, como de la peste, de los diyeis famosos.

A la deriva del concierto, crecen las islas que hemos sido, en los aplausos construimos el país. Siento su mano, como un terral tibio, remar hasta mi espalda. La madrugada es una conversación de cuerdas y suspiros.

Desafina el reloj, somos extraños en el último dolor de la guitarra.



(Pradera de los Corralillos / Autobús 49 – Plaza de Castilla / Autobús 27- Cibeles – Calle de Alcalá – Banco de España hacia Sol / CÍRCULO DE BELLAS ARTES DE MADRID / KINDERWUNSCH*)


La infancia y el deseo: una sola puerta. El picaporte oculto como un tesoro helado que habrá de morir tras un tajo de pasión (de tiempo). Las estrías: ríos que nacieron antes. Nadie advirtió la señal en la cosecha. Pero reconozco al padre en el cristal (me reconozco); en la mujer desnuda (su reflejo torcido) que desciende por mi cara sin placer.

La muchacha de negro se persigna ante el cuadro: intercambian secretos. Seduce el perfil que a mi lado desmiente la cascada, la gravedad, todo lo que declina; todo lo que soy mirando a dos mujeres que se salvan de mis ojos castrados.

Nacen aquí milagros que no puedo celebrar con canciones de añejo.

Hijos: las raíces que van rompiendo mi carne.


Soy el testigo; el criminal.

*Kinderwunsch es un término alemán que hace referencia a la unión de las palabras niños y deseo; al deseo de tener hijos, de lograr un embarazo o de la infertilidad. A propósito de la exposición homónima de Ana Casas Broda, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.


(Barajas / MAD O6: 25 / Brussels Airlines 3732/ Zaventem / BRU 08:45)


                                                                                                                              Para Guille y Manuel


Los trenes apuntan a París. Pero en Bruselas, dos grúas, como pájaros enormes, comentan de alta política sobre los tejados y hay invierno en el balcón y mis amigos han dispuesto el café contra nevadas. Se dice que puede llover, mas es tan blanco aquí y tan alta la chimenea, que la lluvia pudiera ser de otra sustancia. Y las torres (modernas y feudales) se besan con tal desparpajo, que parece una lección de convivencia.

Barajamos itinerarios. Mi hermana juega con las nueces antes de beber y yo imagino islas tan cerca de su boca. Islas. Y la palabra me hace temblar y ajusto la chaqueta. Pero es otra la herida y otro el vértigo en esta parte del mapa.

Preguntamos, antes del nombre del parque y del pedestal, dónde acampan las cervezas oscuras, dónde se ausculta una ciudad de nadie como ésta. Y escuchamos las voces de las frutas. Un oasis, dice mi amigo: un color que ha crecido en el cristal…y curiosos posponemos París sin que nos duela.



(Rue de la Loi / Plaza de Luxemburgo / Plaza de Londres / MATONGUÉ)


                                                                                               Las mareas del asfalto y la luz sin color…
                                                                                                                                Marguerite Yourcenar


Un recodo leve, la lluvia que remonta toda siesta. Andar: único antídoto para el tiempo de vidrio. La celada.

Han dispuesto el color como si África fuera más que la piel áspera de los aguacates; como si las frutas pudieran desprender ese rojo salvaje que me besa en la lengua y me arrastra el rubor hasta las manos. Las manos que quieren tocar, asir; creer que hemos vuelto sin volar, que hemos rendido algún misterio y merecemos (otra vez) los sentidos.

Las especias acosan nuestra sangre. El aguijón alcanza el ritmo. Al compás de unos tambores que cuelgan silenciosos, saboreo, en la nieve del coco, el pescado del rey. Pero hay combinaciones tentadoras como la canción negra que adereza la carne y nos clava, sonámbulos, en medio del camino.

Soy forastero y cómplice; conquistador. Los anfitriones se desdoblan, nos atan a una leyenda que sabemos proscrita; la marea es otra en este huerto de Bruselas.

Apenas un salto a la culpa, unas cuadras más acá del cristal, nos parecemos. El aire gotea, azucarado.

Acaso restituidos, salvados de esa transparencia con la que cruzamos el asfalto, miramos el reloj. ¿Ya somos (otra vez) aquéllos?


(Bruxelles Midi 07:43/Thalys 9308/ París Nord 09:05)


                                                                                                Por donde ha de subir el hombre al cielo

                                                                                               Manuel Serafín Pichardo; A la Torre Eiffel


Una calle ancha me lleva hasta la Torre, que desde lejos es masculina, eréctil, pretenciosa. Pero al llegar, atisbas su secreto de chica a horcajadas, libidinosa, puta, amamantando turistas de todas las monedas que escogen aún sus flancos para llegarse al cielo y mirar la ciudad con aires alpinistas.

No sé tú, Vallejo, pero yo olvido los golpes, los tantos golpes, y espío a esas muchachas de escotes arriesgados, que te piden una foto encima de la ciudad luz, casi colgadas de la ilusión de poseerla, de la ilusión de cobrarle, en picada, su enorme majestad.

No sé tú, pero yo olvido, navego toda esa cintura de metal, allá arriba, tan cerca de Dios o del sueño. Tan ausente, que puedo tararear una habanera sin saber los compases, respirar mi país sin coordenadas, paladear la felicidad como un orate.






(06:33 / Madrid Chamartin / Tren Alvia / 08:55/ ÁVILA)


La muerte llega descalza, en puntillas. Saluda a las cigüeñas que anidan en las torres, desafiantes en su sincera maternidad, confiadas.

Desde las piedras, el murmullo de la sangre, la historia que el turista prefiere.

Vuelo sobre el valle. Recomponemos, con las tejas, otra geografía que no sabe el resto: mensajes de ultramar (entre la arcilla y el verde) que arriban con sabor a café.

En un patio interior solo el silencio me descubre. Respiro un aire común, antiguo.

Me reconozco en las columnas holladas, en las túnicas donde la poesía, desde la eternidad, ha rodado hasta el suelo y sobrevive en el polvo, entre adoquines y transeúntes.

Un día de gracia: sobre el chuletón, como arrugas, los años del destierro; en la esperanza: el vino.

Por qué se hizo tarde para restaurar; cómo nos acuchilló el frío la velada. Qué atajos adivinó ese tren, enemigo de todo rumor, para devolverme, cuando todo parecía más cierto.

La muerte, que vino por nostalgia –pienso- mientras escapo.









lunes, 15 de agosto de 2016

Armando Pacheco, obra ganadora del primer Certamen Regional de Poesía Sian Ka'an Bakhalal 2016.

Obra ganadora del primer Certamen Regional de Poesía Syan Kaan Bakhalal 2016, que convocó el Ayuntamiento de Bacalar, Quintana Roo.

Cantar de los poetas

I

Nacimos en estas tierras 
cuando las criaturas aún dormían en el barro 
y los hombres apenas eran proyecto de los dioses
Consolamos a los mares en aquellos tiempos violentos
Las bestias se regocijaban 
mientras las selvas 
con sus extensos brazos 
escondían cánticos que nuestros diminutos cuerpos cantaban 
 Fuimos testigos del nacimiento del primero hombre

(Surgió de la tierra, del agua y el fuego 
de las manos oscuras y temblorosas 
de un artesano que le soñó desde siglos

desnudo ángel en el exilio 
en su destierro, el estridente grito 
se confunde con el suspiro del viento 
Nació del maíz y del dolor de la noche 
y arrastrándose fue el primero en vagar 
por parajes ennegrecidos 
cuando todo se volvió desierto 

haraposo sucio descalzo 
deambuló cuando sólo era silueta 
y entonces la mujer de ojos negros 
manos suaves apacibles
piel bronceada y cabellos azabache  
fue su primera figura materna )

desnudos, las otras criaturas caminaban en el barro
las bestias les lamían los rostros y las manos
en las noches de grandes brillos 
ellos jugaron a la inocencia 
y así nació la generación de carne
Los mares
con sus olas vehementes 
presagiaron la nueva época 
y los peces multicolores lanzaron lamentos 
mientras nuestra música se escondió en los árboles  

II
 
Romperé en momentos el pasado 
Como grillo
cantaré mis dolencias 
a la oscura madre 
y cuando las horas hayan caído 
como hojas muertas de los arbustos 
y los mares silenciado su oleaje 
el niño bailará alegremente 
junto a los frondosos vástagos de la tierra

III

Los jóvenes en la pirámide 
a la serpiente llaman
incienso de huesos 
el vaho de tarde baña 
efigie de leopardo 
guerrero antiguo 
juega 
libre 
el muchacho caracol 
mutando en voces 
ocultándose el círculo embriagador de nativos 
cae sobre una urbe legendaria 
y un friso ancestral 
presagia sacrificios 
rituales de amantes miles 
entonces 
llora un dios con sangre: 
a la ráfaga de luz se la acabaron sus hijos

IV

Perdieron el rostro del tiempo 
el sonido nocturno de las aves que se dispersaron 
en una ciudad que ya no conoce a sus fantasmas 

No creyeron en la inocencia 
Autores del cataclismo
condenaron a los niños más virginales 
que fueron devorados por las quimeras  

Pero el semblante de la luna 
es la eterna promesa del marginal 

Un hombre con harapos recorre las calles 
de una metrópoli en ruinas 
Hoy surgimos de los árboles y las olas 
En lo más alto de la antigua casa paterna 
se contemplan los atardeceres
que ya no son como antes 
que ya no son el retrato del pintor rupestre    

Dejaron escapar los sentimientos en el abismo
En la oscuridad duerme su pasado 
que ya sólo son fragmentos de una historia 

Fantasmagórica silueta se escapa
Los ojos apoderados de luces 
verán la levedad de los besos
y en la perpetuidad 
la efigie rutilante de tu cuerpo 
murmurará su tacto
No alcanzarán mis manos 
para recorrerte y tatuar 
tu ola de piel suavísima 
esa piel que se esconde en los años 
como estrellas viejas 
que ocultan su opaco brillo
atrás de las galaxias jóvenes. 
Los labios sentirán la soledad 
el vacío de la carne
la fantasmagórica silueta que se escapa 
con el fulguroso sueño de mil noches. 
Se aprende del dolor
cuando se observa al retoño caer con sangre, 
desenterrar al niño recién nacido 
con la sonrisa aun en el semblante tierno; 
dolor, cuando la mar de muchos peces 
es mancillada por el rencor de naciones 
que no saben de la tierra, 
que no saben de los juegos infantiles
ni de las promesas del hijo a los padres; 
y se sabe del dolor 
cuando una lluvia que debiera refrescar 
el santuario de una ciudad legendaria, 
se transforma en balas que arrojan
los hombres que odian su propia raza; 
por hombres que sueñan sentarse a la derecha 
de un dios sin rostro 
de un dios sin vida.
Ese sentimiento que golpetea 
a los niños cercenados por las piedras, 
por los misiles que como ráfagas 
descienden en los hospitales y escuelas; 
esa tristeza que se gana la mujer sin manto 
cuando la señala el racismo de su pueblo 
y le quitan al vástago 
para convertirlo en un soldado suicida, 
ese sentimiento, 
también es el dolor que no se oculta 
que perpetuo estará en la carne, 
en los sueños,
en los lustros de vida del joven 
que deseoso de aprender 
no tuvo más que el arma como único libro 
para su futuro ya escrito en su espalda. 

La pobreza, parte del sufrimiento, 
como arma blanca traspasa la epidermis
y el bebé llora y llora como la lluvia; 
familias tristes caminan por los desiertos 
y el alacrán acecha en enormes palacios .   

Se aprende del dolor 
cuando la enfermedad llega con la alegría 
y los campos son arruinados por el polvo 
cementerio de cadáveres donde duermen 
los animales mutilados por el llanto 
de una noche que no tiene luna 
de una noche sin aire o la llovizna.

Y se aprende del dolor 
en los templos de sacrificio
cuando en vez de palomas y becerros 
lapidan a una mujer sin nombre 
o degüellan a un periodista extranjero 
todo en nombre de un dios 
que no tiene carne 
que no tiene alma. 

Se aprende del dolor, 
en cada instante de nuestra vida


Armando Pacheco es autor de la plaqueta Entidad en el exilio y otros poemas de añoranza y recibió una Mención de Honor Premio Regional de Poesía “José Díaz Bolio”, en 2005 y 2006. Al mismo tiempo, obtuvo el primer lugar del Premio Estatal de Poesía Joven “Jorge Lara Rivera”, así como el tercer puesto en la edición 2010 de ese mismo certamen.
 En 2007, fue becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Yucatán y un año más tarde, se desempeñó como coeditor del Mapa Poético Mexicano. Su obra ha figurado  en antologías y revistas de corte cultural.
 Actualmente, funge como director del Colectivo Letras en Rebeldía y del Diario Arte y Cultura en Rebeldía. Además, es integrante fundador del grupo de música folclórica latinoamericana Qallay y coordinador de la Sala de Lectura de la Biblioteca “Melba Alfaro Gómez”.

martes, 23 de febrero de 2016

AGRADECIMIENTOS DEL COMITÉ ORGANIZADOR DEL ENCUENTRO DE ESCRITORES LITERATURA EN ACCIÓN BAKHALAL 2016

AGRADECIMIENTOS DEL COMITÉ ORGANIZADOR DEL ENCUENTRO DE ESCRITORES LITERATURA EN ACCIÓN
BAKHALAL 2016

Como bien señalamos en la presentación de este encuentro, para nosotros es primordial que la literatura se desborde –ya no digamos en su propio recipiente de papel- sino que abra meandros y conquiste espacios más abiertos y disponibles al lector común o, bien, a cualquier interesado en el mundo de la literatura. ¿Cómo hacerlo? Nuestra respuesta fue, entonces, llevar a los escritores a compartir su trabajo literario a plazas, comunidades y escuelas, para que con ello personas que no tienen al alcance un libro o que no conozcan del universo de la literatura tengan una oportunidad para conocerlo.

El comité organizador del 1er Encuentro de Escritores Literatura en Acción Bakhalal 2016 sabe perfectamente que esta ardua tarea apenas inicia. Hemos decidido, pues, acatar las responsabilidades que las características de un encuentro como tal contiene.
Concretar esto, sin embargo, no sería posible, en ninguna forma, sin la ayuda de brazos externos. Agradecemos por eso en gran manera al Municipio de Bacalar, a la Asociación Municipio X, a la Casa Internacional del Escritor, a la Asociación de Lancheros, a los directivos de las escuelas que nos permitieron el contacto de los escritores con los alumnos, al regidor Ernesto Silveira, al ingeniero Eduardo Ic Sandy, a Mauricio Morales Beiza, a Prudencio Alcocer Balam, a Emilio Ariza, a Nicanor Piña, a la maestra Estela Gómez Trejo, a Irma Carmela Sansores, a Maria de Jesus Rodriguez, a la maestra Suemi Mcliberty, a Romel Cano Álvarez, a Edwin Cano Álvarez, a Vladimir Yam, a Enrique Bautista, a Normando Medina, a Jorge Juárez, a El Pájaro Toj, a José Antonio Íñiguez y Claudia Argüelles; a los restaurantes El manatí y La huapachosa; a los hoteles Toto Blue, La Ceiba y el Roble; a Meztly Suárez Mcliberty y a los alumnos de la UQROO, que registraron la memoria del Encuentro; así como a los escritores que formaron parte de esta primera edición del Encuentro de Escritores Literatura en Acción Bakhalal 2016.

Que la siguiente edición sea, pues, la consolidación de este encuentro como plataforma de difusión de la literatura en acción y la comprobación del buen estado en materia literaria que vive Quintana Roo.

¡Nos vemos en Bakhalal, febrero del 2017!

Comité Organizador
Ramón Iván Suárez Caamal

Jorge Enrique Yam

jueves, 4 de febrero de 2016

PROGRAMA DEL 1ER ENCUENTRO BAKHALAL 2016



PROGRAMA DEL 1ER ENCUENTRO DE ESCRITORES LITERATURA EN ACCIÒN BAKHALAL 2016

LUNES 

8:30  Desayuno

10:00 Inauguración en el Balneario Municipal

10:30 - 12:00 Talleres y lecturas en las Escuelas de Bacalar.

12:30 - 14:00 En el Balneario Municipal 

·        - Mesa de lectura: Amílcar Zúñiga, Norma Quintana, Gustavo Iñiguez y Ana Mar Moreno.
·         -Charla sobre la poesía colimense, por Juan Carlos Recinos.
·           -Presentación del libro “Aura en el jardín” de Éver Canul Góngora.

  (Modera: Brigi Maribel Pulido)

·         
14:30 Comida

16:30 -18:30 Balneario Municipal

·        - Presentación del libro de cuentos "De lo más íntimo, con un toque de rebeldía y amor...", por  Lucila May.
·        - Mesa lectura: René Alberto Vera, Aldo Revfaulknest, David Guerrero y Ángel Sulub. (Modera Tania Sol Portillo)
·        - Presentación de la revista Tropo a la uña y  del libro de poesía Memoria de Gabuch, de David Anuar por René Alberto Vera.
·         -Mesa de lectura: Mabel Quinto,  Rodolfo Novelo, Alfredo Yánez, Alma Freyre y Alma de la Luna. (Modera Liz Marín)

19:00 Festival Palacio Municipal 

·         -Contacuentos Víctor Chi (Personaje: Pancho Chencho)
·        - Chac Carlitos interpreta canciones de su disco “Conjuro para despertar a las piedras”.
·         -Presentación del libro “Al abordaje” de Ramón Iván Suárez Caamal a cargo de la cantacuentos
       Brigi Maribel Pulido (Cantacuentos)

21:00 cena  


   
MARTES 

8:30 Desayuno

9:30 - 11:30 Talleres y lecturas en las Escuelas de Bacalar.

12:00 - 13:00 En el Balneario Municipal 
·         -Charla titulada "Jajal ts'íib: escribir desde el maya profundo", por Issac Carrillo.
·         -Mesa de lectura: Roxy Pérez, Gladys Fuentes Milla,  Uylder Torrez y Eligio Moha. 
        (Modera: Liz Marín)

13:15 Paseo al Museo del Fuerte de San Felipe Bacalar

14:00 Comida (en el Balneario Municipal)

16:00 - 19:30 Balneario Municipal 
·         -Presentación del libro Instrospectum Vide, por Germán Solórzano Hidalgo (el autor) y Francisco    Lope Ávila    
       -Presentación de la plaquette "...Y los muertos Marcela" de Chary Gumeta.
·         -Mesa de lectura: José Antonio Íñiguez, Rebeca Alle Rivera, Cecilia Juárez, Cristian Poot y Mabel Quinto. (Modera: Anamar Moreno).
·         -Presentación de la editorial Tintarena.
·         -Presentación del libro La sal de enferma, por Rodrigo Quijano (el autor) y Cristian Poot.
·         -Presentación Colectivo Editorial, por Luis Antonio González Silva y María Luisa Villarreal Sonora.
·         -Presentación del libro “Le ku'uk wayak'naje', "la ardilla que soñó"  y la traducción al maya de”Te' tu'ux ku kajtal le wáayo'obo', “Donde viven los monstruos” por Hilario Chi Canul.
·         -Mesa de lectura: Javier España, Agustín Labrada y Francisco Lope Ávila.  
       (Modera: Liz Marín)

19:30 Festival Palacio Municipal 

21:00 Cena 




 MIÉRCOLES

8:30 Desayuno 

8:30 a 10:00 En comunidades
·         Participación en la comunidad de Huatusco, en el Municipio de Bacalar, en la escuela primaria “Ignacio Ramírez” de los contacuentos Brigi Maribel Pulido y Víctor Chi.

10: 30 a 11:30 En comunidades
·         Participación en la comunidad David Gustavo del municipio Bacalar, en la Escuela Primaria “Guadalupe Victoria” por los contacuentos Brigi Maribel Pulido y Víctor Chi.

9:00 - 12:30 Balneario Municipal 
·         -Ponencia sobre "Cultura e identidad en el sur de México: Chiapas", por Chary Gumeta.
·         -Mesa de lectura de narrativa: Liz Marín, Saulo Aguilar Bernés, Gamaliel Sánchez Salinas e Isaac    Carrillo. Modera Germán Solórzano).
*     -Ponencia La Literatura Maya, un Canto a los Cuatro Elementos” por Addy García.
·        - Presentación del libro Miedo en la sangre (notas para salvar el alma), por Ornán Gómez.
·        - Presentación del libro de poesía "Fabricante de abismos", por Michelle Rincón.
*    -Presentación del libro “La tragedia de Jonás” de Gamaliel Sánchez Salinas.
·        - Mesa de lectura: Mario Islasáinz, Saúl Ordoñez, Juan Carlos Recinos, Andrés Cisneros y Emma Rivero.  (Modera: Ana Mar Moreno)

13:00 Paseo en Lancha 

15:30 Almuerzo 

18:00 - 21:00 Balneario Municipal (Lecturas y clausura del Encuentro de Escritores).

·         -Presentación del libro Götterdämmerung. Antología personal de Luis Armenta Malpica (El Ángel Editor, Ecuador, 2015), por Gustavo Iñiguez.
*    -Presentación del libro “La soledad se hizo relámpago” de Agustín Labrada.
·        - Mesa de lectura: Ramón Iván Suárez Caamal y Luis Armenta Malpica.
·         -Presentación del libros “Desde los siete azules” antología del Primer Encuentro de Escritores  Literatura en Acción Bakhalal 2016.
·       -  Norma Espinoza Zurita –Recital de poesía y música Naktáantbáal. (Modera: Mabel Quinto).
·         Clausura del evento.